Me gusta Friday Fax y aconsejo a los lectores de Hispanidad que se suscriban a él. Un grupo de gente con agallas que da la batalla contra el Nuevo Orden Mundial (NOM), en los organismos multilaterales como Naciones Unidas o en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Dan la batalla por los más débiles, los no nacidos o por la familia natural. Me gusta, ante todo, porque son optimistas, tradúzcanlo por esperanzados.
Por ejemplo, en su último boletín nos informan de dos aspectos interesantes. Por ahora, dos batallas ganadas en un mundo en el que tal parece que la gente sensata, es decir, alegre, se nos presentan como profetas del desastre y cronistas de la derrota. Por una parte, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos acaba de responder al lobby gay que el homomonio no es un derecho, que se conformen con las famosas uniones civiles, porque el gaymonio es la negación de la procreación y la educación de las futuras generaciones. Esto es, del futuro de la sociedad y hasta de la raza humana.También nos informan de que la ONU, que consiguiera su gran victoria antivida en 1994, con la puñetera Conferencia de El Cairo, no ha conseguido introducir el aborto como un derecho. Y es que eso de matar a tu hijo indefenso en tus propias entrañas y encima considerarlo uno de los sacrosantos derechos humanos es algo que repugna a mucha gente que ha podido violentar su conciencia pero no desea violentar su estómago.
Y sin dramatismos: las cosas están mal pero no están tan mal. Por ejemplo, Friday Fax nos recuerda que sólo 10 de los 47 países miembros del Consejo de Europa han regulado el homomonio, un pequeño detalle que no verán ustedes resaltado en los medios progres, ni progres de izquierdas ni progres de derechas.
¡Viva Friday Fax! Por lo que lucha y por cómo luchan: con alegría, siguiendo el lema de los cristianos de hoy: de derrota en derrota hasta la victoria final. Y, de vez en vez, alguna que otra victoria.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com