Sr. Director:
Los nuevos planes de estudios ingleses introducirán la educación sexual obligatoria en todas las escuelas del país en niños a partir de 5 años.
Muchos padres han elevado su preocupación por dicha precocidad, impropia de una etapa en la que los pequeños desarrollan el juego creativo y van superando su torpeza en la elaboración del lenguaje.
Sus habilidades y coordinación son inmaduras e incompletas, incompatibles con la asimilación de un mundo extraño y tan ajeno a ellos como es el del sexo. El objetivo político es reducir el número de embarazos entre menores, pero en lugar de dejar que los niños jueguen con sus trenes y sus muñecas de trapo, los incitan a que inviertan su imaginación en actos sexuales transformándolos en pequeños monstruos: mentes de adulto instruidos insidiosamente en la sexualidad, habitando en cuerpos frágiles de niño. Y eso, en lugar de evitar el sexo, promocionará a niños-violadores a edades cada vez más tempranas.
Pili S Montalbán
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