Y es que tras las últimas reformas de los modelos de financiación sanitaria, las capacidades del Estado central han quedado más que diezmadas. Como le gusta recordar al secretario de Estado de Presupuestos, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, España es el estado más adelgazado de todo nuestro entorno. O dicho de otra forma: las ubres del Estado no dan para más. Así que ya es hora de que las CCAA vayan buscando nuevas vías para solventar sus problemas financieros.
Algunas, como Castilla la Mancha, ya han adoptado la estrategia del cinturón: recorte de prestaciones. No se opera a nadie que supere determinada edad. Al fin y al cabo, previsiblemente se va a morir relativamente pronto y no resulta "rentable". Por supuesto, nunca se explicita, pero la práctica existe: "No, es que a su edad..." Esto de envejecer cada vez se pone más difícil.