Sr. Director:

Escribe el Sr. Ramón Valls, filósofo, en un artículo a un periódico, la licitud de utilizar embriones sobrantes con fines terapéuticos. Señor Valls: cuando el gameto masculino y femenino se unen en la fecundación, se forma una sola primera célula en cuyo ADN está toda la información genética necesaria para que ese individuo se desarrolle y llegue en un futuro a cumplir la edad que usted tiene ahora, por ejemplo. Es decir, es la misma persona desde el principio en distintos estadios de desarrollo.

¿Se puede manipular a una persona en beneficio de otra perjudicando gravemente a la primera? Nunca. Aunque no sienta dolor y no se entere. Una persona no es lo que siente sino lo que es en su totalidad. Si usted hubiera sido un embrión sobrante, no habría podido escribir su artículo, ni hacer otras cosas. ¿En tan poco tiene su aportación personal a este mundo?

Pilar Blanco del Prado

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