Una buena idea-fuerza se expande por sí sola, especialmente si se formula el concepto de forma correcta. El papa Benedicto XVI expuso en su carta apostólica Sacramentum Caritatis, los cuatro principios no negociables para el político y el elector católicos: vida, familia, libertad de enseñanza y bien común.
Pues bien, ahora son los obispos ecuatorianos los que utilizan la terminología "puntos no negociables", esto es, inaceptables, para un católico, en referencia al nuevo texto constitucional que pretende el presidente ecuatoriano Correa, otro aprendiz de dictador, disfrazado de demócrata como tantos otros que pululan hoy por el mundo.
Porque esto es lo malo de transigir con los principios no negociables, que es el camino más directo hacia la tiranía.
Eulogio López
