Ni Los Polanco ni La Sexta pueden sobrevivir solos, a pesar de todas las ayudas de Zapatero

Lo que sí es verdad es que las diferencias sobre la ecuación de canje son abismales. Eso sí, Roures mantiene abiertas las negociaciones con Berlusconi para sangrar a Cebrián.

El diario La Razón aseguraba en su edición del viernes 7 -y le plagia Reuters- que PRISA ha roto sus negociaciones con Imagina (mejor, con Mediapro-La Sexta). Bueno, se han roto porque se han ido de vacaciones y porque no se han puesto de acuerdo, como informamos ayer, sobre la ecuación de canje.

Además, la opción de los Polanco de introducir todo el grupo PRISA, incluido El País y la SER en el acuerdo no gusta a Roures -sí los socios madrileños, los Migueles (José Miguel Contreras y Miguel Barroso)- porque supone, cara a la precitada ecuación de canje, valorar más los activos que la deuda. No es que Mediapro no tenga deuda, pero tira con pólvora del Rey y sus principales acreedores son los bancos públicos ICO y Catalán de Finanzas.

Eso sí, Jaume Roures es un lanzao. Está dispuesto a olvidarse de PRISA y pactar un acuerdo con la Mediaset de Silvio Berlusconi.

Concluyendo: tanto PRISA como Mediapro tienen que fusionarse porque ambos están en quiebra, claro que podrá ser aquello de sumar uno malo y otro peor y toparse con tres problemas.

En cualquier caso, los Polanco consideran que se puede salvar a costa de no pagar su deuda, que supera los 5.000 millones de euros a los bancos acreedores. Todo sea por el pluralismo informativo.
Por tanto, poco importa que la propia PRISA, en tanto sociedad cotizada, haya comunicado a la CNMV que las negociaciones están rotas. Eso es tanto como decir que en septiembre pueden volver a reanudarse, y sí, también busca nuevos socios que alivien su cíitica situación contable.