Sr. Director:

 

Quiere el nuevo presidente de la Generalidad de Cataluña, perdón Carod-Rovira, "buscar una fórmula amable para impulsar el uso del catalán". ¿Cómo lo va a hacer? ¿Hipnotizando al personal? ¿Dónde estará esta amabilidad, cuando su único objetivo es aplicar la totalidad de la Ley del Catalán, una ley que coarta la libertad de expresión del individuo, en tanto que, en los organismos oficiales no se tiene la posibilidad de recibir impresos e información escrita en español (y a veces, ni oral)?
¿Y la libertad de cátedra que debería tener por ley el profesorado en todos los niveles educativos? Porque en guarderías y escuelas de primaria, el profesorado tiene prohibido por ley, no sólo dar sus clases en español, sino también dirigirse a cualquier niño en esta lengua. Incuso hay escuelas -cada vez más- en las que se regaña al alumnado en patios, pasillos, e incluso puerta de la escuela, si les oye hablar en español.
 
Ahora quiere extender la inmersión (término que significa "asfixia") a la enseñanza secundaria. Hasta ahora era el profesor quien elegía la lengua en que impartir sus clases, como sucede en la Universidad, pues ya hace muchos años que se implantan asignaturas exclusivamente en catalán, sin opción tan siquiera de hacer los exámenes en la lengua en la que el alumno se exprese mejor -incluso clases de lengua española se imparten en catalán-.
 
Sin habiendo podido hacer hasta ahora algunas asignaturas en español en secundaria, ya están saliendo maestros de la escuela de Magisterio de la Universidad de Barcelona sin saber la ortografía de la lengua española. ¿Qué pasará cuando comiencen a salir las promociones de inmersión en secundaria? ¿Qué nivel tendrán? Probablemente serán bilingües en catalán y en inglés, pero analfabetos en español, la lengua de su país, la segunda lengua operativa más importante del mundo, tras el inglés.
 
Los sueños románticos hace un siglo que pasaron, pero algunos aún están anclados en el siglo XIX, y sus compañeros de viaje, aún más, en la época medieval, en la Corona de Aragón.

Rosario Suárez 

rosasuar@telefonica.net