Sr. Director:

Con la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo, de condenar al Estado francés por haber discriminado a una profesora lesbiana, se está modificando el tradicional derecho de adopción en la medida en que la discriminación se plantea desde el punto de vista del adoptante, y no del adoptado, hasta ahora se consideraba el derecho del niño a ser adoptado por un padre y una madre.

Además, esta sentencia va a suponer que los criterios que se establecen para el control de la idoneidad de los adoptantes se modifiquen sustancialmente en algunos países, máxime con la presión que con argumentos legales, pero no éticos, van a ejercer algunos lobbys.

El derecho del niño a ser adoptado por unos padres requiere de las condiciones de un entorno social adecuado para el desarrollo pleno de su personalidad, y eso no ocurre cuando se da de hecho la ausencia consciente de uno de los modelos antropológicos básicos, el masculino y el femenino.

Aunque no soy jurista, no tengo duda de que esto no representa un avance si no un retroceso en el derecho.

Jesús Domingo Martínez

jesusdomingo125@gmail.com