Por su simpatía, reproducimos una serie de chistes que han llegado a nuestra redacción con el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, como protagonista, lo que demuestra el sentido del humor de los españoles en medio del clima social y político actual.
1.- ¿Qué hacía Moratinos mirando fijamente un tetrabrik de zumo?
Es que ponía: Concentrado.
2.- - Sr. Moratinos, Vd. que ha viajado tanto, dígame cinco animales del Polo
Norte.
- Pues dos pingüinos y tres focas.
3.- ¿En qué se diferencia Moratinos de una pila?
En que las pilas tienen un lado positivo.
4.- Moratinos está en el aeropuerto y ve a un hombre acercarse a una máquina de refrescos, meter 1 euro y sacar una lata. Se acerca él, mete 1 euro y le sale una lata, mete otro euro y sale otra, y así lleva ya 15 latas cuando se acerca su secretario y le dice:
- Sr. Ministro, déjelo ya que se va el avión.
- ¿Cómo lo voy a dejar ahora que estoy ganando?
5.- Moratinos entra en una librería y le pregunta al librero :
- ¿Tiene usted algo de Hemingway?
- Si, "El viejo y el mar"
- Hummm... déme "El mar".
6.- Moratinos toma un avión y pasa una azafata repartiendo chicles.
- Oiga, y esto ¿para qué es?
- Para que no tengan molestias en los oídos al cambiar de presión. Todo va bien, y cuando han aterrizado Moratinos le dice a la azafata:
- Oiga, ¿cómo me puedo quitar el chicle de las orejas?
7.- En el Ministerio de Exteriores se han ido amontonando papeles y ya no queda sitio en los archivos, así que un día deciden tirar algunos papeles inútiles para hacer algo de sitio. Una secretaria no está segura de si unos legajos son útiles o no, y le pregunta a Moratinos:
- Señor ministro, ¿tiramos también estos expedientes?
- A ver... pues... no sé... bueno, tírelos, pero antes haga una fotocopia, por si acaso.