Sr. Director: 

La «Federación Mundial de Asociaciones de Médicos Católicos» (FIAMC, por sus siglas en francés) ha lanzado un «llamamiento urgente» a los parlamentos británico y español y a la Unión Europea para que detengan los abortos ilegales que, con «complicidad» y pasividad de ambos países, se han comprobado en Barcelona.

«Abortos tardíos ilegales en Cataluña, con la complicidad de agencias británicas y tolerados por el gobierno regional: ¿Dónde está Europa?»: se pregunta el presidente de la FIAMC --que representa a treinta mil médicos de más de medio centenar de países de los cinco continentes, el doctor Gian Luigi Gigli, en una nota del pasado fin de semana.

«Médicos Cristianos de Cataluña», miembro de la FIAMC sospechaba desde hace años «que ciertas clínicas de Barcelona realizan abortos tardíos y más que tardíos, fuera de cualquier control por parte de las autoridades públicas», explica el médico.

Con la colaboración de dos reporteros camuflados del inglés «Sunday Telegraph», los médicos católicos de Cataluña «pueden probar con un vídeo --afirma-- la existencia de una red internacional de abortos tardíos, a la cual mujeres británicas fueron enviadas por parte de agencias gubernamentales».
Daniel Foggo y Charlotte Edwardes --realmente embarazada son los profesionales de la información que obtuvieron de la clínica «Ginemedex» de Barcelona (España) «la evidencia de falsos documentos que afirmaban emergencia ginecológica, para sobrepasar los términos legales y realizar el aborto de un bebé sano de 26 semanas», relata la nota de la FIAMC.

«La extensión de la red criminal de abortos ilegales se muestra claramente en las conversaciones grabadas, con muchas mujeres en avanzado estado de gestación filmadas mientras esperaban su turno», constata el doctor Gigli.

La complicidad de agencias gubernamentales británicas que referían pacientes a Barcelona ha sido también desenmascarada», advierte.

Con el reportaje del «Sunday Telegraph» «se documenta claramente el creciente negocio de los abortos tardíos y la inercia de las autoridades españolas para controlar los abortos ilegales y el turismo abortero», puntualiza.

También --prosigue-- «se prueba la mentalidad abortista de agencias como la British Pregnancy Advisory Service».

«Impresionada» por la visualización del vídeo, la FIAMC «hace un llamamiento urgente a los parlamentos Británico y Español para intervenir y presionar a los respectivos gobiernos a detener este tipo de crímenes».

Exhorta también «a la Unión Europea para que tome medidas contra los fraudes de ley documentados en Gran Bretaña y en España».

«Denunciamos los crímenes contra vidas inocentes causados por el negocio del turismo del aborto y los peligros de los abortos tardíos sobre la salud de las madres, todo ello ignorado por el British Pregnancy Advisory Service», manifiesta el doctor Gigli.

ZENIT.org