Era lo que comentaban en el Partido Popular tras conocerse el acuerdo vago a más no poder- adoptado por los jefes de Estado y de Gobierno y que fecha para junio de 2007 la liberalización total de los mercados de gas y electricidad. Era una forma de lavar la cara ante los profundos desacuerdos entre Francia y Alemania por la OPA de E.ON sobre Endesa.
EN el PP se refieren a que la liberalización del merado energético fue la prioridad de la Vicepresidencia de Loyola de Palacio en la Comisión, que durante un sexenio no logró avanzar un sólo metro por la oposición frontal de Francia, que consideraba, y aún considera, que su EDF es una empresa estratégica de la muy estratégica política nuclear francesa.
Todo el mundo sabe que privatizar sin liberalizar no es suficiente, pero aún tiene más claro todo el mundo que liberalizar sin privatizar no tiene sentido alguno, especialmente cuando el suministro depende de compañías privadas.