El relativismo que impera en Occidente no lleva a la libertad religiosa, sino a una "tolerancia hostil", afirmó durante la cumbre, en Roma, de la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OSCE), sobre la discriminación de los cristianos, el arzobispo Mamberti.
El prelado admitió que la mayor parte de los crímenes de odio contra los cristianos tienen lugar fuera del área de la OSCE, pero afirmó que hay "signos preocupantes" también en Europa. Citó en este sentido un informe de la Oficina para las Instituciones Democráticas y los Derechos Humanos (ODIHR), que "ofrece una prueba irrefutable de una creciente intolerancia contra los cristianos".
Monseñor Mamberti explicó que la promoción y la consolidación de la libertad religiosa está en el centro de la prevención de este tipo de crímenes.
"La libertad religiosa no puede limitarse a la simple libertad de culto, aunque esta última sea obviamente una parte importante de ella", afirmó. "Con el debido respeto por los derechos de todos, la libertad religiosa incluye, entre otros, el derecho a predicar, educar, convertir, contribuir al discurso político y participar plenamente en las actividades públicas".
Pedro García