Huyeron del régimen otomano, pero sí se acomodaron a las costumbres de los países de acogida
La revista Atenea nos sorprende con un curioso artículo sobre el Islam en Hispanoamérica, escrito por el Teniente Coronel Germán Sánchez Arroyo.
En la segunda mitad del siglo XIX comienza la gran migración de musulmanes hacia Hispanoamérica. Se trataba de jóvenes que escaparon del modelo social impuesto por el régimen otomano y que sí que se acomodaron y asumieron la forma de vida existente en el territorio que les acogía, mezclándose incluso con las gentes que poblaban Brasil, Argentina, Colombia o Venezuela. Sus descendientes se llaman hoy Carlos Menem, Carlos Roberto Flores Facussé, Antonio Saca González o Abdalá Bucaram.