Considera que la interpretación de Teherán limita el objetivo y el fin de la Convención
Esto de la Alianza de Civilizaciones cada día resulta más complejo. Buen rollito y "todas las culturas son iguales". Hasta que dejan de serlo. España ha examinado la interpretación que la república islámica de Irán ha realizado de la Convención contra la Toma de Rehenes. Para resumir, el departamento de Moratinos, no está de acuerdo.
"El Gobierno del Reino de España considera que esta declaración interpretativa no puede limitar el ámbito de aplicación de la Convención, ya que, en virtud de la propia Convención, los actos de toma de rehenes, como manifestaciones del terrorismo internacional, cualquiera que sea su causa, nunca pueden estar justificados", señala el Gobierno español.
Moratinos añade que si el objetivo de la declaración iraní fuera excluir de los actos prohibidos por la Convención "los actos cometidos en el marco de la lucha de los pueblos contra la dominación colonial o la ocupación extranjera", la reserva sería contraria al objetivo y fin de la Convención. Vamos, que quedaría desnaturalizado.
Así que en lenguaje diplomático, Exteriores finaliza afirmando que seguramente Irán no quería decir lo que dice. "En consecuencia, el Gobierno del Reino de España considera que la declaración realizada por Irán no tiene efectos jurídicos sobre la Convención". Seguimos adelante. Así lo comunicó España al secretario general de la ONU el pasado 6 de febrero de 2008, según señala el secretario general técnico del ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Francisco Fernández Fábregas.