- "Alterar la Constitución para alcanzar un objetivo político es moralmente inaceptable", explicó Diego Padrón, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana.
- También transmitió las quejas de la población por la falta de transparencia del Gobierno sobre la salud de Chávez.
- Problemas como la violencia o la crisis económica siguen sin afrontarse. Pero destacó lo "hermoso" de "ver cómo los partidarios y los adversarios del presidente han coincidido en presentar oraciones y ofrendas a Dios por su pronta recuperación".
Como se sabe, Chávez ganó las elecciones presidenciales del pasado 7 de octubre, pero ante la recaída del cáncer que padece, pidió a sus simpatizantes que apoyen al vicepresidente, Nicolás Maduro, como su sucesor, por si "ocurre algo". La fecha límite para su vuelta es el próximo 10 de enero, día que tendrá que jurar el cargo como presidente. Pero existe la polémica en Venezuela sobre qué hacer en caso de que Chávez no se presente el día 10 en función de cómo se interprete la Constitución venezolana. Para algunos, la carta Magna establece que deberían convocarse nuevas elecciones.
En la situación ha terciado la Iglesia, que por boca del presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), Mons. Diego Padrón (en la imagen), llamó a las autoridades a respetar la Constitución y no manipularla con el fin de mantener el poder, debido a la incertidumbre sobre si el presidente Hugo Chávez podrá juramentar a un nuevo periodo de Gobierno el próximo 10 de enero, informaba Aciprensa.
Mons. Padrón dijo que si bien no es el propósito de los obispos interpretar la Constitución, "está en juego el bien común del país y la defensa de la ética. Alterar la Constitución para alcanzar un objetivo político es moralmente inaceptable". "Si se prescinde de la Constitución, se prescinde también de la institución y se cae en la pugna por cuotas de poder, en la violencia y en la anarquía e ingobernabilidad", añadió el Presidente de la CEV.
Por ello, indicó que los obispos rechazan "todo posible intento de manipulación de la Constitución en favor de intereses de una parcialidad política y en detrimento de la democracia y de la unidad del país".
Asimismo, transmitió la incertidumbre y molestia que existe en la población ante las informaciones no claras que da el Gobierno sobre la salud del Presidente. "Hasta hoy no ha recibido oficialmente ningún parte médico venezolano. (…); sólo le ha comunicado, con evidente dificultad, su verdad política".
Pero Mons. Padrón destacó los sentimientos de solidaridad hacia Hugo Chávez incluso de sus rivales políticos. "Ha sido hermoso ver cómo los partidarios y los adversarios del presidente han coincidido en presentar oraciones y ofrendas a Dios por su pronta recuperación y regreso, como lo que más conviene al país. Asumir la actitud contraria sería no solamente una conducta anticristiana sino, incluso, inhumana y antivenezolana", afirmó.
El Presidente de la CEV también advirtió que siguen pendientes problemas como la violencia, la crisis económica y el pedido de libertad para la juez María de Lourdes Afiuni, los Comisarios y otros.
Y eso es urgente: mientras dure la situación de limbo político en Venezuela, los graves problemas que padecen los venezolanos no se acometen. Y es lo que esperan todos ellos. Claro que con Chávez no se han solucionado desde el 2 de febrero de 1999, que es cuando llegó al poder...
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
