No faltan medios ni tecnologías, pero el hambre sigue aumentando en el mundo
La crisis se ceba con los más desfavorecidos. A la crisis financiera se sumó una crisis alimentaria cuyos efectos aún perduran. El hambre aparece donde no existía y aumenta en aquellos países donde estaba presente, al contrario que lo que ocurría entre 1969 y 2004, cuando la tasa de desnutrición estaba disminuyendo. La agencia Zenit recoge los datos de la FAO: 1.000 millones de personas desnutridas en el mundo.
Jacques Diouf, director general de la FAO, afirmó que el problema del hambre en el mundo hoy no tiene ya que ver con la falta de medios, tecnologías o programas sino que es exclusivamente político: "Los líderes mundiales -dijo- deberían poner la lucha contra el hambre en primer lugar en la agenda internacional, para poner en marcha programas que permitan asegurar el derecho fundamental, el de la alimentación, a una población que en 2050 superará los nueve mil millones de personas".