- Es la principal conclusión de la Central de Balances del tercer trimestre de 2012 que publica el Banco de España.
- Desde 2009, el volumen de deuda total de las empresas ha bajado un 7%, pero sus beneficios han caído un 57% en los primeros nueve meses del año.
- Es el mayor descenso registrado nunca.
- Además, los costes financieros se han mantenido estables.
- El desapalancamiento de las compañías será un proceso largo, que puede superar los diez años.
- Para el Banco de España, las empresas han pasado de ajustar sus plantillas a reducir los salarios.
- Malo de Molina ha defendido las medidas del Gobierno: la economía española necesita recuperar la confianza y eso se consigue cumpliendo el objetivo de déficit.
La deuda total del sector empresarial español ha bajado, sobre todo en las grandes corporaciones. Concretamente, desde 2009, el volumen total de apalancamiento de las compañías ha bajado un 7%.
Pero este dato, que es positivo, no es suficientemente bueno porque los beneficios de esas mismas compañías también ha caído, concretamente un 57,3% hasta septiembre. Es la mayor caída registrada desde que se inició el histórico, en 2005. Son datos de la Central de Balances Trimestral (CBT) que publica el Banco de España. Así, el ratio de endeudamiento ha aumentado un 1% en los primeros nueves meses del año.
Para José Luis Malo de Molina, director general del Servicio de Estudios del Banco de España (en la imagen), además de la bajada de los beneficios, las compañías han visto cómo los costes financieros se han mantenido.
Según Malo de Molina, los procesos de desapalancamiento son históricamente largos, y pueden superar los diez años. "Lo importante es que las empresas endeudadas saneen sus balances y las que no lo están puedan recibir la financiación que necesitan", ha señalado. Por eso, "es necesario terminar con las reformas estructurales y con el proceso de consolidación fiscal", ha explicado.
En cuanto al empleo y al ajuste realizado por las empresas, Malo de Molina ha afirmado que seguimos inmersos en una fase de crecimiento del paro, aunque en la actualidad, este ajuste se está dando más en los salarios que en la reducción de plantillas. "El ajuste empieza a trasladarse hacia la moderación salarial", ha señalado, por lo que en 2012 el crecimiento de los gastos por trabajador será prácticamente nulo.
Y como no podía ser de otra manera, Malo de Molina ha defendido la política de ajustes del Gobierno. El problema fundamental de la economía de nuestro país es la falta de confianza, y ésta sólo se recuperará si cumplimos con los objetivos de déficit. "No recuperaremos la confianza con más gasto público ni retrasando los objetivos de déficit", ha concluido.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com