A 31 de diciembre de 2009, la deuda neta de Endesa se situó en 18.544 millones de euros, un 32,43% que en 2008. El incremento se ha producido como consecuencia, fundamentalmente, del pago del dividendo de 6.243 millones de euros, que incluía el pago a los accionistas de la totalidad de la plusvalía generada por la venta de activos a E.On realizada en junio de 2008.
La compañía recuerda que, a 31 de diciembre de 2009, tenía acumulado un derecho de cobro de 6.898 millones de euros por diversas partidas reconocidas en la regulación eléctrica española: 4.656 millones de euros por el déficit de tarifa y 2.242 millones de euros por las compensaciones derivadas de los sobrecostes de la generación extrapeninsular. Si se descuentan estos importes, el endeudamiento neto de Endesa en 2009 se sitúa en 11.646 millones de euros.
Por lo demás, Endesa ha incrementado su EBITDA en un 5%, hasta alcanzar 7.228 millones de euros, con especial importancia del negocio en Iberoamérica, donde El EBITDA del negocio se situó en 3.168 millones de euros, un 7% más. Endesa obtuvo un beneficio neto de 3.430 millones de euros en 2009. Este resultado es superior en un 1% al obtenido durante el ejercicio anterior en condiciones homogéneas.
