El 6 de agosto de 1945 estalló la bomba en Hiroshima; el 9 de agosto fue Nagasaki quien sufrió los rigores de la bomba atómica. Sesenta años después Irán tensa la cuerda y anuncia que prosigue con su programa de uranio enriquecido en contra de las advertencias de la Unión Europea y Estados Unidos. Estamos de nuevo ante una situación que puede romper el frágil equilibrio mundial. Y de nuevo ante la amenaza atómica. Porque el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra... aunque estudie historia.
Carlos Ocaña se confirma como el hombre fuerte de Telefónica, en representación de Moncloa... y de Florentino
11/12/24 18:08