La vacuna. 6. f. Virus o principio orgánico que convenientemente preparado se inocula a una persona o a un animal para preservarlos de una enfermedad determinada.
Cuando a finales de los años 70 el PSOE ganó el Ayuntamiento de Valencia, corrió el rumor por la ciudad de que iban a retirar el apoyo a la fiesta de la Patrona, la Virgen de los Desamparados. Ese año, y hasta hoy, la asistencia de fieles a los actos centrales -la Misa d´Infants (Misa de los niños), y la procesión vespertina- que siempre fue numerosa, creció como río fuera de cauce.
La última ocurrencia del gobierno ZP de retirar los honores militares al Santísimo Sacramento, se aprecia como una mezcla de su odio a la religión junto con otra -una más- maniobra de distracción que lleve el comentario en la calle lejos de lo que ya tiene tintes de tragedia nacional: la continuidad de Zapatero como presidente.
Que un Estado sea o no confesional nada tiene que ver con el debido respeto a las raíces históricas de un pueblo, conformadas por el conjunto de sus tradiciones históricas, culturales y -también- religiosas. A Dios no le añade ni le quita honor y gloria una ni mil banderas ni himnos; es el pueblo el que necesita y gusta de dárselo. Es por ello que, según yo lo veo, retirar honores militares al Santísimo Sacramento -como en el caso del Ayuntamiento socialista de Valencia- va a tener el efecto de una vacuna, es decir, poner en alerta las defensas del cuerpo ante una eventual invasión.
Amparo Tos Boix