Se calcula que la cifra podría ascender a los 80.000 millones
Es verdad que existe la figura de la regularización. Si un evasor fiscal decide ponerse al día con Hacienda, la Agencia Tributaria le escucha previo paso por taquilla: paga lo que debe y aquí paz y después gloria. Otra cosa distinta es cuando te han pillado con el carrito del helado. Entonces, te toca pagar lo que debes, más la sanción. Y esta es la que parece que se esta tratando de evitar.
El propio Ocaña reconoce que se está haciendo una regularización con los contribuyentes que tenían cuentas en Suiza. ¿Por qué regularización y no acta directamente? Más: Dice Ocaña que se mantienen relaciones bilaterales entre los contribuyentes y Hacienda. ¿Bilaterales? Al fin y al cabo si hay relación bilateral entre España y Cataluña, cómo no lo va a haber con estos irregulares. ¡Qué país!