La Caixa quiere que Repsol se comprometa en la operación y evitar toda injerencia política. El Gobierno Zapatero prefiere trocear Endesa y repartir los despojos entre E.ON y las otras eléctrica españolas. Conthe dispara los rumores tras insinuar que la CNVM podría aprobar la OPA de E.ON. Europa, y en especial Angela Merkel, exigen que, al menos, E.ON se haga con la parte sustancial de Endesa. Por su parte, Florentino también quiere participar del troceamiento de Endesa y crear una gran eléctrica con Fenosa

Ni Miguel Sebastián se ha entrevistado en Moncloa con el presidente de Endesa, Manuel Pizarro, ni Manuel Pizarro ha comenzado a negociar con La Caixa el futuro de la OPA, tras las palabras de Ricardo Fornesa animando a un acuerdo pacífico.

Quien sí ha hablado, qué casualidad, ha sido Manuel Conthe. Para ser exactos, se ha ido de la lengua, una vez más, afirmando que él no ve problemas en que la CNMV apruebe la OPA de E.ON. Recordemos que, tras paralizar la oferta de GN un juzgado madrileño, la CNMV advirtió, y a todo el mundo le pareció lógico, que el reloj se ponía a cero y que, cuando ambas opas estuvieran listas, de forma sincronizada, comenzaría el periodo de suscripción y la batalla propiamente dicha.

Ojo al dato : en estos momentos, la OPA de Gas Natural (GN) está paralizada por la decisión del juzgado Mercantil núm. 3 de Madrid y por el auto, aún desconocido, del Tribunal Supremo (¡Joé lo que trabajan en el Supremo!). En el entretanto, la oferta de su competidor, E.ON, continúa adelante, sometida a examen de la Comisión Nacional de la Energía y de la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Supongamos que la CNE emite su informe, y que, tal como se espera, no veta la OPA alemana aunque la condiciona. Podríamos encontrarnos entonces con un formidable espectáculo : la OPA que, por el momento, es la mejor- de E.ON continuaría en solitario y podría hacerse con Endesa. ¿Barroco, verdad?

Pero posible. Además, la solidez argumental del Gobierno Zapatero en su pugna con Europa se ha ido diluyendo a medida que las presiones alemanas se hacían más fuertes y que la ya iniciada negociación sobre la futura financiación de la Unión Europea se convertía en algo más que planteamientos teóricos y un poco vagos. A fin de cuentas. La Comisión europea no sólo ha aprobado la OPA de E.ON sobre Endesa sin ningún tipo de condiciones, sino que la comisaria Neelie Kroes, nacida para atacar a España, ha vuelto a criticar el europeísmo de España por las pegas que según ella, están encontrando los alemanes en nuestro país.

Por último la canciller alemana Angela Merkel sólo aceptaría, como mal menor, una E.ON victoriosa en Endesa aunque tuviera que ceder parte de sus activos.

¿Cuál es, pues, la situación política que se vislumbra? Pues la antedicha. La Comisión Nacional de la Energía no votará la OPA de E.ON, pero sí la condicionará. Eso llevaría a un troceamiento de Endesa, que en parte caería en manos de E.ON y en parte de Gas Natural, Iberdrola y Fenosa. Perdedor: Manuel Pizarro.

Claro que eso no es lo que quiere La Caixa. Para el presidente de la mayor entidad de ahorro del país, Ricardo Fornesa, lo mejor sería dejarse de pleitos convertir lo que era una OPA hostil, entre otras cosa para evitar la intromisión política. Y para ello, nada mejor que introducir a Repsol YPF en la operación, mejorar la oferta y crear el grupo energético del que hablábamos el lunes en Hispanidad: Repsol- Endesa-GN y, si se tercia, Aguas de Barcelona.

Un detalle, esta sería la única posibilidad junto a la entrega pura y dura a E.ON, claro está- en la que la primera eléctrica española no quedaría desguazada. En ello estamos. En La Caixa dicen que continúan esperando la llamada de Pizarro. Todo hace pensar que deberían ser ellos quienes descolgaran el teléfono.

Naturalmente, siempre queda el plan B de Gas Natural, que consistía en cambiar Endesa por Iberdrola. Ocurre que esto representaría un fracaso para Rodríguez Zapatero y para el ministro de Industria, José Montilla.

Y existe otra posibilidad, que es aquella por la que apuesta con entusiasmo Florentino Pérez, ese hombre que cada vez afianza más su base de capital en la constructora ACS (Mutua Madrileña ya posee el 3% del capital y esto no ha hecho más que empezar: llegará hasta el 10%) y que desea convertirse en una gran compañía eléctrica. A Florentino no le basta Fenosa. Quiere que parte de Endesa sea para Fenosa y sumarle Cepsa. Esto último está difícil, porque los franceses de Total no quieren, pero está claro que Florentino ha decidido que, además de ser un gran constructor, y ahora que el Real Madrid ya no le ocupa tanto tiempo, quiere convertirse en uno de los grandes del kilowatio.