La cooperación al desarrollo debería ser políticamente neutra. Pero no lo es. Se ha convertido en un instrumento político comandado por esa ideóloga de nombre Leire Pajín. Y así, resulta que los dos programas de cooperación agrícola desarrollados por España se realizan en Marruecos y Cuba, como saben, países estratégicos para la política exterior española.
La iniciativa española de participar en los programas especiales para la seguridad alimentaria de la FAO parte de 1997. Entonces, la Agencia Española de Cooperación internacional firmó cuatro convenios en Honduras, Nicaragua, Guatemala y Mauritania. Ahora, los países elegidos son Cuba y Marruecos.