Pero Acciona asegura que seguirá gestionando la entidad y que recurrirá al Supremo

La Generalitat de Artur Mas queda en entredicho

 

La privatización de Aigües del Ter LLobregat (ATLL) se ha convertido en un verdadero quebradero de cabeza. La Generalitat catalana adjudicó ATLL a Acciona en detrimento de Agbar. Esta recurrió la Adjudicación y un organismo del propio Gobierno catalán le dio la razón. Ante el desacuerdo, la cosa acabó en los tribunales y en la mañana del miércoles conocíamos que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) le daba la razón a Agbar presidida por Ángel Simón.

Pero la cosa no acaba aquí. Acciona dice que seguirá gestionando ATLL y que recurrirá al Supremo el fallo del TSJC. Por de pronto, quien peor ha quedado ha sido, naturalmente la Generalitat de Artur Mas.

Miriam Prat

miriam@hispanidad.com