Es conocido el escaso don de lenguas del actual presidente Rodríguez Zapatero. Pues bien, De la Vega tampoco es bilingüe. El "Tiroles" ha causado mucha preocupación en el Gobierno y mucha diversión entre la opinión pública. No se trata de una atracción de feria, sino de un submarino nuclear que en breve atracará –nunca mejor dicho- en el puerto de Gibraltar.

 

El Gobierno ha realizado una ofensiva diplomática consistente en una conversación entre ‘Desatinos' y su homólogo y tres llamadas telefónicas al embajador de Gran Bretaña en España. Añadan a esta "ofensiva" una manifestación publica de malestar por parte de Moratinos.  El resultado es que el Tireless llegará a Gibraltar y que el Gobierno trabaja ahora en que la estancia sea lo más corta posible. "Que nos molesten, pero poquito". Eso sí, los británicos son "socios y amigos", según De la Vega. ¡Toma diplomacia española!