España ya ha emitido el 72% de la nueva financiación prevista.
España continúa en su labor de bregar contra la prima de riesgo y sus continuos vaivenes por la situación riega. Y aunque puede anunciar que sigue colocando la deuda en los mercados, lo cierto es que la situación es preocupante, especialmente ante los objetivos de contención del gasto.
Según informaba el miércoles Invertia, nuestro país ha emitido hasta este momento el 72% de la nueva financiación prevista y todavía queda medio año por delante, por lo que la contención de la deuda pública se presenta como un objetivo difícil de cumplir. En lo que va de año, la financiación neta ha aumentado un 22%.
Y esa dificultad aumenta cuando en las subastas, el Tesoro debe seguir ofreciendo intereses tan elevados. Pese a que este jueves ha logrado colocar 2.996,65 millones de euros, el máximo previsto, el interés que ha debido ofrecer ha sido demasiado elevado. En los bonos a tres años, el interés ha pasado del 4,051% de la anterior subasta del mes de junio, al 4,320%; mientras tanto, en los bonos a cinco años la rentabilidad se ha situado en los 4,891%, frente a los 4,244% de junio. Son las tasas más elevadas en lo que va de año.
A este ritmo, pese a que España está logrando reducir el déficit público, cuyo objetivo es el 6% en este año, lo que va a lograr es que la deuda, que se encontraba entre las más bajas de Europa, alcance los niveles de países más endeudaos como Italia o Alemania. Y, encima, la prima del riesgo, al alza, rozando los 175 puntos.
Juan María Piñero
juanmaria@hispanidad.com
