Si es cierto lo que señalan las últimas encuestas y se cumple la imparable intención de voto respecto al partido Podemos, no hay duda de que acabaremos viéndoles al frente del gobierno de este país (España).
Y eso pese a que los estudiosos del tema nos explican que gran parte de sus votantes ni siquiera confían en que su programa político pueda resolver nuestros problemas. Es decir, que gran parte de quienes les llevarían a un posible triunfo electoral, lo harían como un voto de castigo frente a los grandes partidos, para condenar a la consabida casta y sus corruptelas.
Lógico cabreo, pero muy peligroso. Porque el grave riesgo que corremos si ganan los de Podemos no es ninguna chorrada, pues aunque Pablo Iglesias sea un joven zorrito viejo que esconde la patita comunista, tanto él como sus amiguetes acabarán tirando finalmente hacia el monte bolivariano. Y conociendo las grandes conquistas que los bolivarianos alcanzan allí donde se implantan..., tenemos el marrón asegurado. Así que lo más prudente sería que comenzásemos a almacenar esos rollos de papel de uso muy personal, a la vez que nos instruyamos sobre las bondades y conveniencias de consumir los alimentos de efectos intestinales más astringentes.
De este modo, cuando Podemos comience a podarnos libertades y vengan las carestías y la época de las cacas flacas, que al menos nos coja con el papel aprendido, y no nos suceda como a nuestros sufridos hermanos venezolanos, que carecen de un lujo tan asquerosamente capitalista como el de hacerlo con papel. Avisados estamos.
Y si ganan los de Podemos, no nos quejemos después reclamando rescates de los economistas de la Escuela de Chicago (que ya solo por el nombre, no hay duda de que algo saben del asunto).
Miguel Ángel Loma Pérez
