Manuel Chaves rompió el pacto con CIU, que pretendía evitar el pitorreo de las pre-primas

El problema aquí no es la noticia, sabida, sino el trasfondo de la misma.

Veamos: CIU pacta con el Gobierno Zapatero una enmienda por la que, en pocas palabras, se retira el registro previo para poner en marcha plantas termosolares, es decir, plantas de energía solar, no confundir con las fotovoltaicas.

Este pre-registro es un chollo para espabilados. Por ejemplo, la programación oficial habla de 500 MW por este tipo de energía primada pero en el Ministerio de Industria hay peticiones para más de 4.000 MW. La razón es muy sencilla, para promocionar la muy verde energía termosolar, el Estado subvenciona no realidades, sino proyectos. Por eso, un montón de espabilados se pre-registra y los no espabilados, los que realmente quieren poner en marcha termosolares -en España, ACS, Abengoa y Acciona -conocidos en el sector como la Triple A, además de Isolux, consiguen anticipar la financiación con cargo al erario público.

Por eso, el ministro de Industria, Miguel Sebastián pactó con CIU una enmienda que suprimiera el registro previo.

Ahí fue Troya. La Triple A e Isolux reaccionaron según el guión previsto: si ustedes hacen eso se perderán varios centenares de miles de millones de puestos de trabajo en un sector de futuro, a fuer de verde ecologista y zapatista.

Y, naturalmente, Sebastián y CIU retiraron la enmienda, más que nada para que los señores Florentino Pérez, José Manuel Entrecanales, Felipe Benjumea y Luis Delso pudieran descansar tranquilos este fin de semana. Se lo merecen. ¿Y los espabilados más pequeños? También se lo merecen.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com