Moodys pone en revisión su calificación sobre España por el crecimiento, el FMI prepara una vía de eventual rescate, el BCE presta a las entidades financieras españolas 131.933,19 millones de euros. Demasiados datos para la preocupación que explica la caída de las bolsas. Zapatero responde con un ejercicio de optimismo antropológico. Dice reafirmar su confianza en la fortaleza y solvencia de España. Va de suyo.
Pero posteriormente añade que tiene confianza en que las reformas van a ser útiles y que seremos capaces de -a pesar del recorte del déficit- mantener el crecimiento y reducir el paro. Es decir, no habrá recortes adicionales del gasto. Zapatero ha aprendido que España es muy importante por lo que debe. Así que su ejercicio de confianza se basa en la próxima publicación europea de las pruebas de esfuerzo. Algunos datos ya han sido filtrados por la propia Moncloa. Nada genera más confianza que la transparencia, concluye Zapatero.
Andrés Velázquez
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