El PSOE mira ahora hacia Cataluña. Al PNV, basta con dejarle más o menos tranquilo
Ibarretxe lleva haciéndose esta pregunta desde hace varios días: ¿Por qué ZP no pacta con Ibarretxe lo que negoció con ETA?
Está celoso porque el protagonismo se lo han llevado los de las pistolas. Pero en lógica, tiene sentido. ¿Por qué Zapatero pacta con los terroristas algo que luego no quiere negociar con el representante legítimo y democrático del pueblo vasco? No hay respuesta de Zapatero que todo lo que llega a decir es que no es comparable y que en todo caso su postura ha sido siempre la misma antes del proceso de paz, durante y ahora. Sabe que no es verdad. Pero, miente, que algo queda.
Para Ibarretxe esto forma parte de lo que califica como principio ético: no negociar con ETA lo que se puede negociar con el lehendakari, para poner a ETA en su sitio y no darle protagonismo político. Los otros principios son el democrático: el derecho a decidir de los vascos y vascas. Y para ello propone que también ZP le acompañe en una consulta en octubre previa al referéndum del 2010.
Por su parte, los principios reiterados por Zapatero son que la propuesta política cuente con el consenso de la ciudadanía vasca y que se ajuste a la Constitución y al procedimiento de reforma estatutaria normado. Mientras tanto: colaboración entre instituciones para cosas concretas. Eso es -a su juicio- lo que deben hacer los gobiernos. Lo otro son especulaciones académicas.
En cualquier caso, el PSOE mira ahora hacia Cataluña. Al PNV, basta con dejarle más o menos tranquilo. ZP no quiere hacer en el ridículo la anterior legislatura.
