Hemos abusado tanto del concepto 'políticamente correcto' que corremos el riesgo de que pase a no significar nada. Pero el Destino nunca abandona a un buen periodista, así que la exclamación ha vuelto a recuperar todo su esplendor descriptivo con la presentación del Fórum Universal de las Culturas, esa especie de Olimpiada Cultural, que se celebrará en Barcelona del 9 de mayo al 26 de septiembre próximos.
Ojo al dato. Según la agenda de Principios y Valores del libro presentación oficial del evento, nos comunica: "Tres son los temas que vertebran el Fórum Barcelona 2004: la diversidad cultural, el desarrollo sostenible y las condiciones de paz". No se puede decir más en menos. He ahí, resumidos en tres tópicos, perdón, conceptos, lo políticamente correcto, lo que hay que decir para pasar totalmente inadvertido, recibir el parabién de la mayoría, ser aceptado en sociedad... y aburrirse como una ostra en un concierto.
Y el desarrollo de los tres grandes principios del ideario promete mucho: Valor democrático (sólo faltaba que fueran autoritarios), derechos y libertades individuales (menos mal que no son colectivas), respeto por las etnias (aún mayor sosiego: no estamos en el racismo), diálogo interreligioso (estrato superior al vulgar diálogo religioso), reconocimiento de la diversidad lingüística (esta es la aportación del Tripartito, seguro), fomento de la creatividad (con un apócope que habla de la democratización del conocimiento, sin duda clave para el futuro), defensa de la biodiversidad (sin comentarios), responsabilidad social (cuya traducción, palabra que no me invento nada, es "crecimiento económico equilibrado y ecológicamente sostenible) y desarrollo sostenible (como creo haber dicho antes).
No es de extrañar que alguien haya calificado el Fórum barcelonés como la entronización de la masonería y de la 'new age'. Son los términos que emplea todo intelectual orgánico, el aparato de Naciones Unidas, los millonarios progresistas y todo aquel a quien no se le ocurre nada que decir.
Para que luego digan que la cultura es difícil. Nada de eso: lo único que hay que hacer es repetir una serie de conceptos y conseguir patrocinadores para organizar bellos espectáculos, que también la farándula tiene derecho a la vida.
Eulogio López
