Tan sólo marcará la pauta de dichos recortes

 

Todo el mundo sabe que el grueso del gasto se encuentra en las CCAA. Sin embargo, de momento se han ido de rositas. El ajuste se ha producido en la Administración General del Estado. Y es evidente que las CCAA deben de participar. El problema es que el Gobierno no se atreve: hay que respetar su autonomía financiera, señalaba en la mañana de este lunes el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña.

De esta manera, el Gobierno sigue resignándose a meter mano a las CCAA. No se plantea recuperar la Ley de Estabilidad para volver a techar el gasto y la deuda de las CCAA, que sería lo razonable. Se acabó la broma. Esperan llegar al acuerdo por consenso. Y Ocaña se muestra entusiasta de que en el Consejo de Política Fiscal y Financiera de este martes se pueda definir dónde efectuar el gasto. Pues bien, no será en este consejo sino en el siguiente cuando se ponga negro sobre blanco. ¿Por qué? Las CCAA son lentas de tijera.