El Ministerio de Trabajo ha hecho públicas las estadísticas de paro de 2009. En 2009 engrosaron las listas del paro 794.640. En total: 3.923.603 personas. Mucha gente. Y todo ello, sin tener en cuenta el maquillaje Caldera, es decir, los parados en cursos de reciclaje profesional que quedan fuera de las estadísticas oficiales. Si sumáramos llegaríamos a los 5 millones de parados.
El Gobierno trata de `vender´ que hay una desaceleración en la destrucción de empleo. Si en 2008 se perdieron 999.416, en 2009 sólo 794.640. Aún así, hay un 25,3% más de parados que el año anterior. Y además, no basta con frenar la aceleración de caída, sino que hay que empujar la recuperación.
Por su parte, el PP ha mostrado por boca de Montoro su máxima preocupación por los malos datos de paro, que suponen una destrucción de 2.200 empleos diarios. Un registro siniestro y terrible. En su opinión, este drama no habría ocurrido si se hubieran emprendido las reformas necesarias, por lo que insta con urgencia al Gobierno a emprenderlas. Hoy son más ineludibles que nunca. E insiste en el slogan de la izquierda: otra política económica es posible.
Y desde el Instituto de Estudios Económicos son menos optimistas: vaticinan una pérdida de 300.000 empleos para este 2010. Menos que en 2009, cierto, pero 300.000 dramas personales y familiares más que se suman a los ya existentes. ¿Alguna reforma por parte del Gobierno? No. Más bien, la oferta del Gobierno es minirreforma que permita una foto. Eso sí, dentro de la paz y de la cohesión social, pero en 2009 la Seguridad Social perdió 727.473 afiliados.