Se retrasa el juicio debido a incomparecencia por el mal tiempoEn Egipto, el tribunal que juzga al depuesto presidente Mohamed Mursi ha retrasado hasta el próximo 1 de febrero la segunda sesión de su proceso por incomparecencia. Y es que Mursi no pudo ser trasladado a la Academia de Policía, en las afueras de El Cairo, desde la prisión de Burg al Arab, en Alejandría, por el mal tiempo que impidió despegar al helicóptero en el que iba a viajar.
Egipto juzga al derrocado presidente Mohamed Mursi y a otros 35 dirigentes islamistas por "conspirar con grupos extranjeros para cometer actos terroristas en el país y divulgar secretos de estado a países extranjeros", según explicó la Fiscalía General.
La fiscalía culpa al presidente depuesto y otros 35 dirigentes islamistas, entre líderes de los Hermanos Musulmanes, y ex asesores presidenciales, de protagonizar "la mayor conspiración de la historia de Egipto" en cooperación con Hamas y Hizbulá, que como todo el mundo sabe, son dos organizaciones radicales yihadistas, o swa, no precisamente 'hermanas de la caridad'.
El ministerio público les imputa una retahíla de cargos: "colaborar con grupos terroristas para cometer actos terroristas en el país, divulgar secretos de estado a países extranjeros y financiar el entrenamiento de terroristas para alcanzar los objetivos de la organización internacional de la Hermandad".
Recordemos que bajo el Gobierno de Mursi con los Hermanos Musulmanes, la persecución religiosa a los cristianos se permitió e incluso se alentó. Por ello, los cristianos aplaudieron la destitución de Mursi por el ejército egipcio. Según Rafik Greiche, portavoz de la Conferencia Episcopal Egipcia, los Hermanos Musulmanes querían instituir un "califato islámico". "El ejército ha llevado a la práctica el deseo del pueblo, que lo ha expresado durante los últimos días con millones de firmas y amplias manifestaciones en El Cairo y en todo el país", afirmó Greiche.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com
Egipto juzga al derrocado presidente Mohamed Mursi y a otros 35 dirigentes islamistas por "conspirar con grupos extranjeros para cometer actos terroristas en el país y divulgar secretos de estado a países extranjeros", según explicó la Fiscalía General.
La fiscalía culpa al presidente depuesto y otros 35 dirigentes islamistas, entre líderes de los Hermanos Musulmanes, y ex asesores presidenciales, de protagonizar "la mayor conspiración de la historia de Egipto" en cooperación con Hamas y Hizbulá, que como todo el mundo sabe, son dos organizaciones radicales yihadistas, o swa, no precisamente 'hermanas de la caridad'.
El ministerio público les imputa una retahíla de cargos: "colaborar con grupos terroristas para cometer actos terroristas en el país, divulgar secretos de estado a países extranjeros y financiar el entrenamiento de terroristas para alcanzar los objetivos de la organización internacional de la Hermandad".
Recordemos que bajo el Gobierno de Mursi con los Hermanos Musulmanes, la persecución religiosa a los cristianos se permitió e incluso se alentó. Por ello, los cristianos aplaudieron la destitución de Mursi por el ejército egipcio. Según Rafik Greiche, portavoz de la Conferencia Episcopal Egipcia, los Hermanos Musulmanes querían instituir un "califato islámico". "El ejército ha llevado a la práctica el deseo del pueblo, que lo ha expresado durante los últimos días con millones de firmas y amplias manifestaciones en El Cairo y en todo el país", afirmó Greiche.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com