Sr. Director:
¡Qué magnífico nivel de modernidad y progresismo hemos alcanzado en nuestra sociedad! ¡Hemos llegado al 50% de abortos en embarazos de jóvenes! Y el diagnóstico de tamaño éxito es, según empeño de los "expertos", que a nuestra juventud le falta información sobre anticonceptivos. Señores, 20.000 embarazos de jóvenes y 10.000 abortos sólo en el 2001 es el resultado de todos estos años de "Póntelo, pónselo"... y haz lo que quieras. ¿Hasta cuándo piensan seguir engañando a nuestros jóvenes? ¿Hasta cuándo hacerles creer que la sexualidad humana se limita a un placer banal de "aquí te pillo, aquí te...", pero, eso sí, con preservativo? ¿Hasta cuándo ocultarles que la felicidad no está en la mera satisfacción de los placeres inmediatos, que la sexualidad tiene otra dimensión en la que ser vivida?
Pero el esperpento llega a su extremo cuando desde determinados medios se permiten acusar de tamaña tragedia a los padres y madres con convicciones morales y religiosas que, según ellos, ocultan información a sus hijas sobre los métodos anticonceptivos y las relaciones sexuales. ¡Patética esta sociedad, inoperante este estado de derecho, en que se pone en duda la capacidad, y se ataca el derecho fundamental, de padres y madres a educar a sus hijos; en que el estado quiere erigirse en educador único de nuestros hijos!
Jorge Cabot Ple
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