La vicepresidenta primera atraviesa su momento político más bajo, cada vez más alejada de Zapatero.
La crisis económica está ahogando al Gobierno, que cada vez sale peor en las encuestas. No sólo eso, sino que Rajoy se coloca por vez primera por encima de Zapatero. De la Vega trata de poner cara de compungida y afirma que comprende y participa de la preocupación ciudadana. Eso es lo que nos ocupa y nos preocupa. Pero el desgaste está ahí. ¿Qué nota se pone el Gobierno? De la Vega elude autocalificar aunque afirma que el gobierno ha hecho lo que tenía que hacer, muestra su confianza en que las medidas adoptadas empiecen a dar sus frutos y apuesta porque en el 2010, empecemos a crecer y consolidemos a la baja la tendencia de destrucción de empleo Es decir, que no habrá creación de empleo en el 2010.
Por lo demás, De la Vega considera que el Gobierno ha hecho lo que tenía que hacer protegiendo a los más débiles, para que no terminen pagando la crisis los que no la han generado, los trabajadores. Considera que se han sentado las bases de un nuevo modelo de crecimiento, etc.
Sobre la desafección ciudadana, ha mostrado también su comprensión con el sentimiento de la ciudadanía, pero considera que el Gobierno ha hecho ya mucho en la lucha contra la corrupción. Ley del suelo, ley de incompatibilidades, transparencia en el patrimonio de los miembros del Gobierno e incremento de medios de la Fiscalía Anticorrupción. ¿A futuro? Trabajará en la nueva Ley de financiación local y en otras que pudieran ser eficaces.
Y todo esto ocurre en el momento político más bajo de la vicepresidenta primera del Gobierno desde que llegara a la Moncloa en 2004. Zapatero no cuenta con ella y sus principales rivales en el Ejecutivo, Miguel Ángel Moratinos, Carme Chacón y Alfredo Pérez Rubalcaba están muy crecidos. De ahí los rumores de que pueda acabar de embajadora de España en Buenos Aires, entiéndase: no es que ella lo desee, ella lo que quiere es continuar, pero a la fuerza ahorcan.