Naciones Unidas ha concluido la Conferencia Mundial de la Juventud como tenía previsto. La Declaración de Guanajuato es el típico documento en el que jugando con las palabras la ONU oficializa sus proyectos de reingeniería social anticristiana. Falta legitimidad democrática, pero eso es lo de menos. Lo importante es fijar sus postulados en un documento aparentemente aprobado por los ciudadanos del mundo. Después los lobbys exigirán su cumplimiento y la traslación a las leyes de los países.
La citada declaración defiende la pluralidad de formas de las familias, la necesidad de fomentar la salud sexual para prevenir el SIDA (traducción: promocionar el uso de los condones), reducir la mortalidad y morbilidad maternas (traducción: más abortos), contribuir al empoderamiento de las mujeres... Lo cuenta Noticias Globales.