A pesar del esfuerzo por mostrar una situación positiva de la realidad económica que hace el Gobierno, su partido y los medios afines, lo que se ve es que tres de cada cuatro españoles perciben la situación económica como mala o muy mala y que el paro sigue siendo el líder indiscutible de los problemas de España.
Lo que sabemos al respecto es algo que está dejando sin empleo a más de siete mil españoles cada día: que ZP nunca aplicará una medida que vaya en contra del socialismo. ¿Qué quiere decir esto? Para contestar basta con saber qué significa el socialismo para el secretario general del partido que lleva ese nombre. El socialismo zapateril significa que jamás hará caso a las recetas que pueda proponer la derecha contra la crisis.
Si Rajoy sugiere reducir impuestos para reactivar la economía, Zapatero contesta que eso es insolidario; si Rajoy propone prolongar la edad de jubilación, Zapatero responde que eso es antisocial; si Rajoy propone conceder créditos a las administraciones públicas para que paguen sus deudas a las empresas privadas, Zapatero dice que eso hay que verlo con cuidado o, en todo caso, que lo mejor es autorizar a los ayuntamientos a endeudarse mucho más; si Rajoy sugiere que se recorte el gasto público, Zapatero se burla y dice que la única forma de generar empleo es gastar más y más, aunque no haya dinero, pues todo es cuestión de apretar el botón de la máquina impresora de billetes...
El socialismo, para Zapatero, consiste, en definitiva, en no molestar a los sindicatos, en ampliar las subvenciones a los parados de larga duración, en aplicar la filosofía del PER andaluz a todo el país. Porque lo importante es esperar a que Obama i/o Alemania saquen las castañas del fuego de la crisis en Estados Unidos y en Europa, en la confianza de que aquí nos llegarán algunas para alimentar a los hambrientos.
Además, por razones naturales, el paro tendrá que dejar de aumentar en algún momento y así, dentro de unos meses, podrá salir en televisión para declarar con una sonrisa triunfal que la crisis empieza a disminuir, como acaba de hacer estos días.
Jesús Martínez Madrid
