- Maduro dice que si pide asilo político a Venezuela, lo concederá.
- Ecuador niega haberle concedido un salvoconducto a Snowden.
- Y Rusia tampoco hace caso a Obama: no le entregará al extécnico de la CIA.
Recordemos que Snowden es un extécnico de la CIA acusado por EEUU de espionaje. Snowden (en la imagen) reveló recientemente a 'The Washington Post' y 'The Guardian' que la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA) posee un programa llamado PRISM con el que accede a los servidores de nueve empresas de Internet, con su consentimiento, para recabar información útil para Inteligencia. Tal revelación no ha gustado nada al gobierno de Obama que desde entonces trata de presionar a todos los países por los que ha pasado para que se lo entreguen. Pero, hasta ahora, todos han 'pasado' de Obama.
Por ejemplo, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, ha defendido la estancia del ex agente de Inteligencia en Moscú, subrayando que se trata de un "pasajero en tránsito" por lo que tiene libertad para viajar, aunque ha considerado que cuanto antes lo haga, mejor será para todos.
Pero es que antes, China permitió que Snowden abandonara Hong Kong.
Y ahora entran en escena los regímenes bolivarianos, tradicionales 'tocanarices' de los estadounidenses, como Ecuador o Venezuela, que podrían estar interesados en acoger a Snowden. Aunque algún beneficio sacarán. No lo van a hacer de manera altruista.
El Gobierno ecuatoriano, no obstante, ha desmentido haberle concedido un salvoconducto a Snowden y ha dicho que está a la espera de una información por escrito de Estados Unidos sobre la situación legal de Snowden, quien solicitó asilo el pasado domingo a Quito.
Por su parte, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha insistido en que si el ex agente de Inteligencia de Estados Unidos Edward Snowden, acusado de espionaje y robo, solicita asilo político a su Gobierno, se lo concederá "casi seguro". "Si nos lo pidiera, lo pensaríamos y casi seguro se lo daríamos porque el asilo político es un derecho de estado humanitario para proteger a los perseguidos", ha dicho.
También criticó el doble rasero de EEUU: "Este muchacho reveló secretos muy delicados, pero Estados Unidos espía a todo el mundo, se le mete en el teléfono a todo el mundo, violando las normas internacionales sobre soberanía y autodeterminación".
La verdad es que el debate entre seguridad y privacidad esa apasionante. Quizá podría resolverse estableciendo el requisito de que para espiar es necesario el permiso judicial, cosa que en el caso de EEUU es dudoso que lo haya respetado...
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com