Sr. Director:
Parece ser que en el famoso hospital de Leganés, dados los últimos indicios, se afianza la hipótesis de que se han estado cometiendo asesinatos con un gran número de pacientes ingresados por urgencias. El modo de acabar con la vida de los enfermos ya lo conocemos, pero aún falta conocer los motivos que han llevado a los profesionales de la medicina a llevar a cabo tan deplorable acción, teniendo en cuenta que dichos profesionales se les supone hipocráticamente aptos para el desempeño de sus funciones sin causar perjuicio alguno a sus pacientes, al menos de forma voluntaria
Los hechos ocurridos en el hospital de Leganés son, según parece, uno de los casos más graves de conducta amoral, en contra de la ética profesional con los añadidos agravantes de premeditación y alevosía con resultado de muerte. Ahora es hora, no solo de pedir responsabilidades a los autores de tan horribles actos, sino también de pedírselas a los políticos y sindicatos pancarteros, que desde un principio haciendo del oportunismo su bandera, sin preocuparles las vidas de estas personas inocentes, personas que su único delito fue enfermar, han defendido a capa y espada a los autores de estos asesinatos.
El oportunismo político sin convicciones que sólo busca acceder al poder utilizando cualquier medio a su alcance, aunque tenga consecuencias nefastas para la población, parece estar muy afianzado en el partido que actualmente nos gobierna y lo utiliza en cualquier ocasión como demuestran los hechos.
Jorge Andrés de Castro Llorente
jdecastroll@gmail.com
