Por cierto, que su sucesora, la socialista Magdalena Álvarez, ha anunciado, en la mañana del martes 27, que se iba a repensar alguna de las últimas decisiones de su Departamento. Entre ellas citó, y no es casualidad, el reparto de espacio en la ampliación del madrileño Aeropuerto de Barajas. Esta ha sido la última y más curiosa decisión de Cascos, que ha beneficiado al Grupo Marsans y ha perjudicado a Iberia.
Dos cuestiones. En primer lugar, Cascos es amigo reconocido de Gonzalo Pascual (vicepresidente de
Más. El presidente de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), José Eladio Seco, quien oficialmente tomó la decisión, no era uno de los favoritos de Cascos ni mantenía buenas relaciones con Marsans.