La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, no ha querido confirmar si la próxima Conferencia de Presidentes Autonómicos será en Barcelona o no. El presidente del Gobierno había anunciado que la próxima conferencia podría ser en cualquier otro lugar dentro del territorio nacional y el presidente de la Generalitat, Pascual Maragall, se adelantó para ofrecer Barcelona como sede para desarrollar el próximo encuentro.
De la Vega ha informado que no hay ninguna decisión tomada y que podría ser Barcelona o "cualquier otro sitio". O sea, que la vicepresidenta no quería darle una alegría a Maragall antes de tiempo. Las buenas noticias hay que administrarlas para cuando sea necesario jugar esa carta. Además, ya se sabe que a la vicepresidenta le ha tocado jugar el papel de poli malo en esa particular partida que el Gobierno mantiene con los nacionalistas. También con los de casa.