- A su juicio, los más perjudicados por esta medida serán los trabajadores más jóvenes y los de mayor edad.
- Según el boletín económico de diciembre del BdE, el PIB continuó cayendo en el cuarto trimestre por la contracción del consumo y la debilidad de la demanda interna.
- El Estado acumuló hasta noviembre un déficit de 28.000 millones de euros, sensiblemente menor que el registrado un año antes, tendencia que debería "acelerarse" en diciembre.
- El déficit por cuenta corriente se redujo un 52,9% en los diez primeros meses del año.
"En la medida en que esta evolución de los salarios refleje el comportamiento de la productividad, cabe pensar que estos dos últimos colectivos podrían verse más afectados por posibles subidas del SMI, dado que difícilmente podrían generar las ganancias de productividad necesarias para compensar la subida del SMI", explica el órgano económico.
Según explica, una subida del SMI afectaría de forma directa a una pequeña porción de trabajadores, que cifra en menos de un 1% -del 2% en el caso de los jóvenes-, a partir de datos de la Muestra Continua de Vidas Laborales (MCVL). Estos trabajadores son aquellos cuyo salario en un año determinado se sitúa por debajo del nivel establecido para el SMI al año siguiente. Si bien, el banco emisor señala que entre los años 2002 y 2010 las alzas del indicador "parecen haberse trasladado a la distribución de los salarios de convenio". "Esta traslación implica que, a pesar de que el porcentaje de trabajadores afectado directamente por el SMI es bajo en España, la incidencia indirecta del SMI es elevada, en la medida en que, vía negociación colectiva, acaba afectando a un porcentaje numeroso de trabajadores", señala.
Así pues, la institución que dirige Luis María Linde (en la imagen) insiste en que "a pesar de que el colectivo potencialmente afectado por los aumentos del SMI es reducido, su impacto sobre la probabilidad de perder el empleo es significativo, especialmente para algunos grupos de trabajadores, como los jóvenes", a lo que añade que "no puede descartarse un efecto agregado de mayor cuantía en la medida en que las subidas del SMI se acaben trasladando al resto de la distribución salarial vía la negociación salarial".
Pero tiene narices. Muy bien que el Banco de España advierta de los efectos macroeconómicos de las medidas del Gobierno. Pero lo importante son las microeconomías (las economías familiares) que con estos sueldos de miseria no llegan a fin de mes. Así que el señor Linde podría preocuparse más por las personas y menos por las cifras.
En otro orden de cosas, el Banco de España afirma que la economía española continuó cayendo en el último trimestre del año por la contracción de la demanda interna y que los indicadores de consumo privado muestran en general una "tónica contractiva".
Salvo las matriculaciones de vehículos particulares, que registraron un aumento intermensual del 5,3% en noviembre debido al impacto del Programa de Incentivos al Vehículo Eficiente (PIVE), destaca que la evolución reciente de la mayoría de los indicadores de consumo privado muestran retrocesos. Así, el índice de comercio al por menor registró en octubre un descenso intermensual del 0,5% y el índice de confianza de los consumidores de la Comisión Europea se situó en noviembre en niveles "muy bajos".
En cuanto a la inversión en construcción, el instituto emisor afirma que la información referente al cuarto trimestre apunta a una prolongación del periodo de contracción de la actividad en el sector, ya que la superficie visada en proyectos de obra nueva de vivienda experimentó una contracción interanual del 57%, mientras que el retroceso del indicador análogo a la edificación no residencial fue del 41%.
Constata, asimismo, una moderación del dinamismo mostrado por el turismo en la parte central del año. Así, tanto las entradas de turistas no residentes como sus pernoctaciones hoteleras se mantuvieron "relativamente estables" en el mes de noviembre en relación con el mismo mes del año anterior, al registrar un aumento del 0,2% y del 0,5% interanual, respectivamente.
En relación a la inversión en bienes de equipo, resalta que el indicador de clima industrial mostró una mejoría en noviembre, tanto en el conjunto de ramas como en la relativa a la producción de bienes de equipo, mientras que los indicadores correspondientes a la actividad industrial siguen mostrando una caída de la producción durante el cuarto trimestre del año.
Respecto a la evolución del déficit público, el Banco de España indica que en el cuarto trimestre de 2012 se concentra una "parte significativa" del impacto de las medidas presupuestarias aprobadas durante el ejercicio, como la subida del IVA y del Impuesto sobre Sociedades, así como la eliminación de la paga extra de diciembre de los empleados públicos.
Además, apunta que la decisión del Gobierno de suspender en este ejercicio el ajuste de las pensiones por la desviación de la inflación de noviembre frente al aumento inicialmente previsto en los Presupuestos contribuirá a moderar el crecimiento de las prestaciones sociales en la parte final del año. Por ello, asegura que el Estado acumuló hasta noviembre un déficit en términos de caja de 28.000 millones de euros, sensiblemente menor que el registrado un año antes, tendencia que, según el instituto emisor, debería "acelerarse" en diciembre.
Por otra parte, según el Banco de España, el déficit acumulado de la balanza por cuenta corriente se situó en 14.909,9 millones de euros en los diez primeros meses del año, lo que representa un descenso del 52,9% respecto al déficit de 31.659,3 millones registrado en el mismo período 2011, informó este viernes el Banco de España.
Esta disminución se debió principalmente a la reducción del déficit del saldo comercial y, en menor medida, del saldo negativo de rentas, y de la ampliación del superávit de servicios, mientras que el saldo negativo de la balanza de transferencias corrientes se incrementó.
El déficit acumulado de la balanza comercial entre enero y octubre de 2012 se situó en 23.208,5 millones de euros, un 31% menos que los 34.020,8 millones del mismo periodo del año anterior, en un contexto de comportamiento dispar de los flujos comerciales, en el que las exportaciones aumentaron y las importaciones disminuyeron ligeramente ( 3,8% y -1,7% en tasa interanual, respectivamente).
Por su parte, el saldo no energético registró un superávit, en contraste con el déficit acumulado el año anterior, mientras que el déficit energético se amplió un 17%.
En la balanza de servicios, el superávit acumulado durante los diez primeros meses de 2012 ascendió a 34.591,5 millones de euros (30.492,7 millones en el mismo período de 2011), como resultado de la favorable evolución de los saldos tanto de turismo y viajes y, sobre todo, de los otros servicios. El saldo positivo de la rúbrica de turismo y viajes se amplió hasta alcanzar 28.623,4 millones en 2012 (27.918,8 millones entre enero y octubre de 2011).
Por su parte, el saldo de los otros servicios contabilizó un superávit de 5.968,1 millones de euros (2.573,9 millones durante el mismo período de 2011).
La balanza de rentas registró un déficit de 17.522,8 millones de euros hasta octubre, inferior al del mismo periodo de 2011, que fue de 20.770,2 millones. Por su parte, la balanza de transferencias corrientes mostró un saldo negativo de 8.770 millones de euros, un 19% superior al de los primeros diez meses del año pasado.
El saldo de la cuenta de capital, que recoge, entre otros conceptos, las transferencias de capital procedentes de la UE, contabilizó un superávit de 4.926,6 millones de euros, frente a los 4.453,9 millones de un año antes.
En cuanto a la negociación colectiva, el avance observado en noviembre se concentró en los convenios revisados, con un incremento medio de los salarios del 1,5%, frente al 0,7% de los de nueva firma, un nivel próximo al 0,5% recomendado en el II Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva. Dado que los convenios de nueva firma contienen aumentos menores y que está pendiente de cierre una proporción elevada de estos acuerdos, el Banco de España confía en que el incremento medio total de los salarios se modere en diciembre.
Sobre la evolución financiera de España, el boletín económico subraya que los datos provisionales referidos a noviembre apuntan a que en dicho mes habría vuelto a elevarse la tasa de reducción interanual del crédito concedido a las sociedades no financieras, mientras que la de la financiación a los hogares se habría mantenido sin cambios y la de los activos financieros líquidos de ambos sectores se habría moderado.
El saldo agregado de las cuentas corriente y de capital, que mide la capacidad o necesidad de financiación generada por las operaciones no financieras de la economía española, fue negativo y se situó en 9.983,3 millones de euros, frente a los 27.205,4 millones de un año antes.
En los diez primeros meses del año, las operaciones financieras de los distintos sectores residentes, excluido el Banco de España, medidas por el saldo de su cuenta financiera, originaron salidas netas de capital por valor de 211.075,4 millones de euros, superiores a las registradas en los diez primeros meses de 2011 de 23.703,3 millones de euros.
En consecuencia, los activos netos del Banco de España frente al exterior descendieron en 215.522,4 millones de euros, en contraste con los 52.699,4 millones del mismo periodo de 2011.
Sólo en el mes de octubre se registró un superávit por cuenta corriente de 865,4 millones de euros, en contraste con el déficit de 1.363,3 millones registrado en igual mes del año pasado.
El Banco de España atribuye esta mejoría a la reducción del déficit comercial y, en menor medida, a la ampliación del superávit de servicios, que compensaron el incremento del déficit en las balanzas de rentas y de transferencias corrientes.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com