Como informamos en nuestro confidencial, Juan Luis Cebrián y los hermanos Polanco mantienen un duelo por la estrategia a seguir en PRISA, que en el caso del primero es muy sencilla: seguir adelante y no pagar un euro a los bancos acreedores que para eso están: para darle dinero al que no lo necesita y al que no se lo devuelve.
Ahora bien, si en algo coinciden Ignacio y Manuel Polanco con Janli es que Digital puede y debe venderse, ya puesto en valor tras la adquisición de un 22% por parte de Silvio Berlusconi y de otro tanto por parte de Telefónica.
Y como ya hemos dicho en otras ocasiones, el primer ministro italiano, cuya primera profesión es gestionar Mediaset, quiere ser el señor de la tv de pago en Europa, para afrontar una competencia de igual a igual como Rupert Murdoch. Don Silvio ofrece a la operadora un reparto de funciones claro en la plataforma: Él manda y Telefónica paga.
A cambio, que para eso es un mercader, Berlusconi ofrece a TEF el sueño de Telecom Italia. Pero ahí ha pinchado en hueso, porque Alierta está hasta el gorro: ha perdido todo su interés por TI porque considera que los italianos nunca permitirán lo que los españoles hemos permitido en Endesa: el control de una empresa clave por parte de un extranjero.
Así que Alierta no está por la labor. Y sí: está harto de Telecom Italia.
Eulogio López
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