Así, como lo están leyendo. De esta manera se manifestó el secretario de Estado de Asuntos Europeos, Alberto Navarro. España es un ejemplo de economía abierta donde se han producido compras importantes por parte de compañías extranjeras como la venta de TALGO, Amena o Alsa; pero en el sector energético, no conozco ninguna OPA hostil, señaló este jueves en Intereconomía.
Navarro también se mostró tranquilo ante el posible examen de la OPA por parte de Bruselas ya que en su opinión, se analizarán exclusivamente sus efectos para la libre competencia. También restó importancia a la posibilidad de que la Comisión abriera un procedimiento de infracción. No sería extraño, nuestro país tiene abiertos un centenar de expedientes, pero sólo la mitad sigue adelante; es algo habitual a lo que estamos acostumbrados, aunque no tengamos una defensa fácil frente a la UE.
Por otra parte, el secretario de Estado adelantó que la defensa de España se basaría en que la OPA de E.ON afectaría a la seguridad nacional y la inexistencia de un mercado europeo de la energía. Y es que, según Navarro, en el Consejo de Primavera de 2002 se decidió que hubiera una interconexión del 10% entre países para el 2005 y esta interconexión se encuentra actualmente en el 3% en el caso de España. Si el día de mañana se interrumpiera el suministro de gas argelino, no tendríamos garantizado el abastecimiento por parte de Francia, señaló.