- Arias Cañete logra frenar un acuedo que perjudicaba a buena parte del sector.
- La CE proponía recortes de entre el 20% y el 40% en algunas de las especies más importantes para nuestro país.
- Al final, las cuotas se mantienen para la merluza del norte, especie estrella en España, y aumenta un 15% la de la merluza del sur. La pesca del lenguado, el gallo y el abadejo, se mantiene igual que en 2012.
- Lo peor, las capturas en caladero nacional, porque "los informes científícos son muy negativos", según el ministro.
Veamos por qué: en primer lugar, se mantiene la cuota de merluza del Norte en los mismos niveles de 2012 (51.500 toneladas al año), a pesar de que Bruselas pretendía rebajarla en un 32%: el Gobierno español está muy satisfecho en este punto.
El Ejecutivo también celebra el aumento del 15% en las capturas de la merluza sur, en caladeros nacionales, porque es el porcentaje máximo que permite el plan de recuperación al que está sometido; así como el 'status quo' para su pesca asociada, como el lenguado, el gallo y el abadejo, para los que la Comisión solicitaba recortes superiores al 20%.
Otro logro -según el ministro español- ha sido el mantenimiento de la cuota del gallo del Norte -para el que la Comisión pedía una rebaja del 40%- y el aumento del 6% de la cuota de la cigala de Gran Sol, para la que el Ejecutivo comunitario proponía una reducción del 12%.
En cuanto a la bacaladilla en las aguas comunitarias, se ha logrado un incremento del 44,32%, aunque es una "cuota provisional", a la espera de que terminen las negociaciones del acuerdo pesquero con Noruega, tras lo cual el aumento en la cuota total superará el 57%.
En el lado opuesto, el de las concesiones, la mayor que ha tenido que hacer España se refiere al rape del caladero nacional, para el que se planteaba una reducción del 38%, que finalmente se logró limitar al 25%. En cuanto al rape del Golfo de Vizcaya y de Gran Sol, la disminución propuesta inicialmente del 20% se ha conseguido rebajar a un 5%.
En el caladero nacional "no fue posible incrementar las cantidades propuestas, ya que los informes científicos son muy negativos", aunque se espera que el plan de recuperación merluza-cigala propicie una mejora en los próximos años, ha indicado Arias Cañete.
Según las informaciones que llegan, la Comisión Europea (CE) ha tenido finalmente que ceder en una parte de los recortes que había propuesto, ante la oposición de numerosos Estados miembros, que consideraban excesivas las reducciones.
Pero, ¿qué opinan los pescadores españoles? El secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat, ha recibido con "satisfacción moderada" el acuerdo porque pese a que la delegación española no ha conseguido todas las demandas que exigía, sí ha mejorado las condiciones para especies "importantísimas para España", como la merluza norte, que mantendrá la cuota de 2012 pese a que Damanaki exigía de inicio una reducción del 32%.
En aguas del norte, Garat también ha destacado que se haya logrado el 'status quo' para el gallo, pese a que la Comisión pedía para este recurso un recorte del 40 por ciento, y ha lamentado que el rape sufra una reducción del 5% por el "impacto que va a tener en la flota", aunque valore que dicha reducción sea menor que la del 20% propuesta inicialmente.
En cuanto a los caladeros nacionales, Garat ha apuntado alguna "buena noticia" por el incremento del 5% en las capturas de boquerón en el golfo de Cádiz, aunque haya "reducciones considerables" del 25% en otras especies de importancia para España como el rape.
Garat ha advertido del perjuicio para el sector por perder posibilidades de pesca en un momento de crisis económica porque "menos capturas supone menos ingresos" y ha criticado que cada año las negociaciones arranquen de propuestas muy "restrictivas" y concluyan "con menos kilos de pesca para el sector".
No obstante, ahora, a comer buen pescado en Navidades...
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com
