El porcentaje de personas que acudieron al menos una vez al médico de familia en los 12 meses anteriores a la entrevista subió a medida que aumentó la edad (67,2% de las personas de 16 a 29 años, frente al 94,0% de las de 65 o más años). Esta diferencia también se apreció en las visitas al médico especialista, según la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) en Europa que publica el INE.
Sin embargo, las visitas al dentista mostraron un comportamiento opuesto. El 48,9% de los jóvenes acudió al menos una vez al dentista, frente al 38,8% de los mayores.
Por nacionalidad, los extranjeros acudieron menos al médico de familia, al especialista o al dentista que los españoles. Por ejemplo, el 52,6% de los españoles acudió al médico especialista, frente al 43,4% de los extranjeros de la Unión Europea (UE) y el 36,1% de los del resto del mundo.
Atendiendo al nivel de ingresos, el porcentaje de la población de 16 y más años que acudió al menos una vez al médico de familia apenas varió (78,5% en los hogares con ingresos bajos, frente a 79,3% en los de ingresos altos).
La obesidad afectó al 13,7% de la población de 16 y más años en 2017. Fue más frecuente en hombres (14,7%) que en mujeres (12,7%)
Por el contrario, las visitas al especialista o dentista sí mostraron variaciones. Así, las personas con mayores ingresos acudieron con mayor frecuencia que aquellas con ingresos bajos (57,7% frente a 43,8% en el caso del especialista, y 60,6% frente a 35,3% en el del dentista).
La obesidad afectó al 13,7% de la población de 16 y más años en 2017. Fue más frecuente en hombres (14,7%) que en mujeres (12,7%) y se presentó en mayor medida en las personas con un nivel de formación de educación primaria o inferior (21,7%), que en las de educación superior (8,6%).
Por nivel de ingresos, la obesidad afectó más a las personas con ingresos bajos (15,0%) que a las de ingresos altos (9,0%).
Las personas de 16 y más años dedicaron en 2017 un promedio de 202 minutos semanales a realizar una actividad física en su tiempo libre, como practicar un deporte, caminar deprisa, etcétera. Por nacionalidad, los españoles dedicaron unos 205 minutos semanales, frente a los 180 minutos de los extranjeros de la Unión Europea (UE) y los 152 de los extranjeros del resto del mundo. En las personas con ingresos altos el promedio fue de 232 minutos semanales, mientras que en las de ingresos bajos el tiempo medio se redujo a 180 minutos.
El 77,2% de las personas de 16 y más años afirmó comer fruta a diario en 2017. La frecuencia se incrementó con la edad. Así, el 67,1% de las personas de 16 a 29 años consumió fruta diariamente, frente al 88,3% de las de 65 o más años.
El consumo diario de verduras, ensaladas o legumbres fue algo inferior (64,7% de las personas), siendo también menor entre los jóvenes (57,6%) que entre los mayores (69,8%).
La carga que supusieron los gastos de asistencia médica también varió según el nivel de ingresos
La frecuencia de consumo creció con el nivel de ingresos. Así, el 69,4% de las personas con ingresos bajos consumió fruta diariamente, frente al 83,6% de las personas con ingresos altos. Por su parte, el 58,4% de las personas con ingresos bajos tomó verduras, ensaladas o legumbres a diario, frente el 69,3% de las de ingresos altos.
La carga que supusieron los gastos de asistencia médica también varió según el nivel de ingresos. Al 5,6% de los hogares con ingresos altos le supusieron una carga pesada, frente al 9,8% de los hogares con ingresos bajos.
Y lo mismo sucedió con la carga de los gastos de asistencia dental o en medicamentos. A los hogares con menores ingresos les supuso una mayor carga que a los que tenían ingresos altos (un 28,9% frente al 17,3% en el caso de la asistencia dental, y un 11,9% frente al 4,6% en el de medicamentos).