Uno de los motivos del director Santi Trullenque para adaptar al cine “El Fred que crema”, la obra teatral de Agustí Franch, era que abordaba un tema poco tratado en el cine español: el de los “pasadores”, esa gente que cruzada a huidos de uno lado al otro de los Pirineos, una odisea realmente complicada dado las nieves que caían entonces esos montes que separaban España del resto de Europa.

En el invierno del año 1943, un joven matrimonio (Antoni y Sara) que habitan en Andorra, y están esperando su primer hijo, sobreviven como pueden a sus dificultades económicas. En su aldea, en la frontera, resuenan los ecos de la Segunda Guerra Mundial que se desarrolla en Europa. La llegada a su hogar de una familia de judíos, que huyen de la persecución nazi, trastocará su existencia y el pasado, lleno de secretos, saldrá a la luz.

La lucha por la supervivencia a pesar de las dificultades impregna todo este relato donde el odio y el mal tienen su hueco, nadie puede saber a dónde le conducirá el miedo. Trullenque, seguramente por su erudito conocimiento del cine clásico, ha elaborado una película (también es guionista) donde no se aprecia en absoluto que se trata de su debut detrás de la cámara en un largometraje porque desde las interpretaciones (magistral la de Greta Fernández), a la puesta en escena, fotografía o música todo está perfectamente planificado, a pesar de las dificultades que conllevó su rodaje, afectado como otros por la pandemia. La única nota discordante de este drama histórico realista, pero según él buscado intencionadamente, es el histrionismo del personaje del malvado nazi que aterroriza a los habitantes de la aldea y que, como perro de presa, huele que algún desconocido se ha refugiado entre esas gentes.

La tragedia familiar que encierra la historia nos hace reflexionar sobre los secretos que se esconden en ambientes y sociedades cerradas donde se producen choques directos: ahí tenemos el ejemplo de la excelente As bestas, basada en hechos reales.

Los responsables de la película han optado por exhibir esta película es su lenguaje original, el catalán, por lo que solo se podrá ver esta interesante aunque violenta película en el circuito de cines de Versión Original Subtitulada (VOSE)

Para: los que quieran ver una película de cine español diferente, muy violenta, inspirada en los pasadores de frontera.