- El president tiene hasta el jueves para rectificar, pero insiste en la "la brutal violencia policial ejercida" y pide diálogo tras haberse saltado todas las leyes.
- En su misiva se sitúa al mismo nivel que el Estado: "Europa no entiende otra forma de resolver conflictos que no pase por el diálogo, la negociación y el acuerdo".
- "Durante los próximos dos meses, nuestro principal objetivo es emplazarle a dialogar".
- Y pide que "se revierta la represión contra el pueblo y el Gobierno de Cataluña".
Recordemos que el Gobierno central había dado de plazo hasta este lunes a las 10:00 al presidente de la Generalitat,
Carlos Puigdemont, para que aclarase si había declarado o no la
independencia de Cataluña mediante una
Declaración Unilateral de Independencia.
Pues bien: la
carta ha llegado por fin al Ejecutivo y una vez más Puigdemont, en su línea,
vuelve a tomar el pelo a los españoles y al Gobierno central al no aclarar, en su respuesta al requerimiento gubernamental si declaró o no la independencia.
En su
cínica respuesta se limita a asegurar, sobre esa supuesta Declaración Unilateral de Independencia, que "la suspensión del mandato político surgido de las urnas el 1 de octubre demuestra la firme voluntad de encontrar la solución y no el enfrentamiento".
"La situación que vivimos es de tal trascendencia que exige respuestas y soluciones políticas que estén a la altura. M
i carta quiere contribuir a alcanzar este tipo de respuestas, que son las que nos pide la mayoría de la sociedad y las que se esperan de Europa, que no entiende otra forma de resolver conflictos que no pase por el diálogo, la negociación y el acuerdo", afirma el presidente de Cataluña.
"En este sentido, me sorprendió que en sus escrito del pasado 11 de octubre, anunciara la voluntad de su Gobierno de poner en marcha el artículo 155 de la Constitución para suspender el autogobierno de Cataluña", añade.
Puigdemont hace dos peticiones al jefe del Ejecutivo: por un lado, que "se revierta la represión contra el pueblo y el Gobierno de Cataluña"; y, la segunda, concretar "lo antes posible"
una reunión "que permita explorar los primeros acuerdos".
"Durante los próximos dos meses, nuestro principal objetivo es emplazarle a dialogar y que todas aquellas instituciones, personalidades internacionales, españolas y catalanas que han expresado su voluntad de abrir una camino de negociación tengan la oportunidad de explorarlo. Comprobaremos de esta manera el compromiso de cada una de las partes a hallar una solución acordada", afirma Puigdemont en su misiva al Gobierno.
El president también defiende a al major de los Mossos,
Josep Lluís Trapero, al que define como "uno de los cuadros policiales con más prestigio de la policía europea y que cumple con su labor de forma rigurosa y garantista"; y a los "dos de los líderes de la sociedad civil catalana"- en referencia a los presidentes de la ANC,
Jordi Sánchez, y Ómnium Cultural,
Jordi Cuixart- que, a juicio de Puigdemont, "han impulsado manifestaciones pacíficas de millones de personas desde el año 2010.
Asimismo, critica "la
vulneración de los derechos fundamentales; la intervención y congelación de cuentas bancarias que impiden que atendamos nuestras obligaciones con las personas más necesitadas; la censura en internet y de medios de comunicación; la violación del secreto postal; las detenciones de servidores públicos; y la brutal violencia policial ejercida contra la población civil pacífica el día 1 de octubre".
"Nuestra propuesta de diálogo es sincera, pese a todo lo ocurrido, pero lógicamente es incompatible con el actual clima de creciente represión y amenaza", insiste, para pedir que no se "deteriore más la situación": "Con buena voluntad, reconociendo el problema y mirándolo de cara, estoy seguro de que podemos encontrar el camino de la solución", concluye la carta.
El 'president' también ha adjuntado en su respuesta las referencias documentales de su intervención, así como de la ley del referéndum y los resultados del 1-O.
Recordemos también que el Gobierno central fijó un segundo plazo, hasta el jueves a las 10:00, para que Puigdemont rectifique y evite la
aplicación del 155. Pero ya no queda otro remedio.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com