- Tras la remodelación del Consejo, Salvador Gabarró busca un acuerdo comercial duradero con los franceses, en principio sin intercambios accionariales.
- Dentro de la reestructuración de Criteria, no habrá fusión con Repsol pero sí acuerdos comerciales, pues se considera que Gas Natural Fenosa necesita más tamaño.
- Eso sí, sin perder su papel de empresa estrella dentro de Caixa-Criteria.
- Por cierto, que Criteria salga a bolsa es una posibilidad remota.
- Por otra parte, Repsol deberá reducir costes, una vez se consume la absorción de Talisman.
- ¿Podría desinvertir en GNF? Es una posibilidad. Criteria, desde luego, lo apoyaría.
- No olvidemos que el grupo industrial de Caixa posee una deuda que se aproxima a los 7.000 millones de euros.
- Y que pretende, como adelantara Hispanidad, traspasar la participación en Repsol desde Caixabank a Caixa… o al menos una parte.
Salvador Gabarró, presidente de Gas Natural Fenosa (GNF) (
en la imagen), ya ha concluido la
remodelación del Consejo, cuyo punto clave es el nuevo vicepresidente, Isidro Fainé. Ahora ha llegado el momento de crecer, pero no mediante
fusiones, sino mediante acuerdos comerciales. Es la nueva etapa de las energéticas en Occidente: empresas que tienen que buscarse su
materia prima a la par que realizar fuertes
inversiones en tecnología y en redes y que, encima, son
estratégicas para sus gobiernos. El resultado de esa ecuación supone evitar las fusiones y lograr acuerdos comerciales de larga duración.
El acuerdo que ahora busca Gabarró para
GNF es
Suez-Gaz de France. Ambas empresas han tenido una relación de amor-odio. GNF dejó claro a los galos que no querían tener mucho que ver con ellos y que se largaran de su accionariado. Otrosí: Suez lleva taponando la
entrada en Europa de la gasera española pero ahora, con la nueva política europea de grandes
gasoductos(toquen madera) resulta que franceses y españoles podrán -podrían- convertirse en
aliados.
Por otra parte, como ya ha dicho una y otra vez
Hispanidad, la famosa salida de
Repsol de GNF continúa sin producirse. Es cierto que
Criteria sigue pensando en deshacerse de parte de su participación en GNF, por ejemplo desde el 36% al 30%. Por eso no le vendría mal que Repsol vendiera parte, que no todo, desde su 30%. Y este puede ser el momento, dado que Repsol, cuando se cierra la compra de
Talisman se verá obligado a reducir costes y a cuidar su
apalancamiento.
Y al mismo tiempo,
Isidro Fainé,
como adelantará Hispanidad,
pretende traspasar la participación en Repsol (12%) desde Caixabank a Caixa. No tiene por qué hacerse de una sola vez, pero ya empieza a tocar. Estamos hablando de unos 2.500 millones de euros.
Además, la
deuda de Criteria nació en su nueva etapa, tras la segregación, con una deuda próxima a los 7.000 millones de euros. Ese apalancamiento hay que reducirlo.
En cualquier caso,
GNF quedará entre Criteria y Repsol. Se trata de crecer en
gas y el socio más próximo se llama Suez-GDF.
La salida a bolsa de Criteria no está próxima, como nunca lo estuvo la salida de Repsol de GNF.
Caixabank ha lanzado esa idea para alejar a los políticos de bocado tan sabroso. Y hay que reconocer que la bolsa tiene una virtud -ahora mismo no recuerdo otras-: espanta a los políticos como el ajo a los vampiros.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com